Aventura en México: SIPMC

Con Eva Castañeda, Diana del Ángel, Jocelyn Martínez y Jorge Aguilera

El Seminario de Investigación en Poesía Mexicana Contemporánea celebró su décimo aniversario en la BUAP gracias a la organización de Alejandro Palma. Fue justo aquí, en Puebla, donde participé por primera vez en un congreso con quienes tan fácil hacen la vida y la investigación en México. El objetivo de la Jornada fue mostrar a demás estudiantes cómo licenciarse o doctorarse sin perder la cabeza, en grupo.

Acompañé de nuevo a Alejandro Palma a Radio BUAP. Hablamos de la Jornada, de la poesía experimental y de los proyectos que presentamos: el Archivo Negro de la Poesía Mexicana, la revista América sin Nombre o el libro que verá la luz en Aguascalientes dentro de un par de semanas. Cómo se vuelcan, con qué cariño recoge la noticia Irving Bautista en el Boletín universitario. Todo ello fue posible gracias a Toño, creativo investigador que recuerda a Gerardo Arana en su aniversario luctuoso.

El Seminario en la UNAM, 2011

De la ciudad de México vinieron la coordinadora, Eva Castañeda, Jorge Aguilera, Diana del Ángel y Jocelyn Martínez, quien armó un completo recuento de los Coloquios y actividades que hicieron desde que Israel Ramírez fundó el SIPMC en 2009. Por ella di con esta familia integrada por el ya mencionado Alejandro Palma, su tocayo Alejandro Higashi, Mariana Ortiz y Diego Alcázar, además de quienes en su día también estuvieron: Manuel Iris, Cristina Rivera Garza o Roberto Cruz. En una de las fotos que recopiló Joce, en el primer Coloquio que organizaron en la UNAM, con Raúl Renán o Samuel Gordon, aparecía con mi carnalita madrileña María Álvarez, que ahora se encuentra en Guanajuato continuando su investigación sobre Ibargüengoitia. Fue la primera vez que, sin saberlo, vi al equipo que me ha enganchado a la poesía mexicana.

Después de conseguir el libro de Yelitza Ruiz, Cartografía del tren (BUAP, 2018), fuimos a brindar a La pasita: cantina donde un español murió al intentar alcanzar el récord de cien tragos de este licor que aguanta la pasa y el queso. Se quedó en 93. Ahí recordamos los proyectos que están por llegar.

Mijail Lamas, Gustavo Osorio, Andrea Rivas y Alí Calderón

Con motivo del día del libro, Alí Calderón, Gustavo Osorio, Andrea Rivas y Mijail Lamas leyeron en la librería del Complejo Cultural Universitario de la BUAP. Al final, alguien preguntó por el metro, por la rima, por una poesía como la de antes, parecí entender. Los endecasílabos se rompieron y ya fluyen al tiempo que se esconden entre las siete sílabas.

Ya están terminando las clases. En una vimos algunas imágenes que le sirven a Juan José Millás para diseccionar el mundo cada domingo en El País Semanal. Por mi tía Maruja empecé a analizar sus textos en el instituto. Leía sus articuentos. También algunos de sus poemas, antes de que los quitaran de alguna página web. Para mi sorpresa, lo conocían; lo habían trabajado en la materia de Comunicación. Son inteligentes y capaces de interpretar en catalán un poema de Mercè Rodoreda, autora de uno de los libros que le cambiaron la vida a Enrique Serna. Vamos corrigiendo los trabajos finales y los capítulos de tesis que pronto les permitirán licenciarse.

Coco ensaya para el Teatro Principal

La requeteanunciada película La maldición de La Llorona no es ni de lejos la sombra que sigue creándose en torno a la bellísima leyenda mexicana. La industria estadounidense, una vez más, busca en lo popular una acogida que apenas pasa de la frialdad de sustos de cámara; lejos del logro que tuvo, por ejemplo, con el Día de muertos Coco.

Desde hace unas semanas, es fácil conseguir en México un vino manchego llamado Monterío. Por 60 pesos (unos tres euros) bebes un rico tinto casi al precio de España. Por unas elecciones en las que, pese a la dificultad para votar en el extranjero, los resultados nos permiten volver. Ahora bien, que los medios de comunicación nos hayan preparado para un auge del fascismo no quiere decir que los más de dos millones de personas que votan a han votado a Vox desmerezcan nuestra incredulidad. Lo peor es que no están tan lejos. Más poesía.