martes, 7 de agosto de 2012

ANIVERSARIO

Justo hace un año estaba en México, en un inolvidable hostal llamado El Cenote Azul donde pasé algunas de las mejores tardes tomando, riendo y ¿por qué no? también llorando. Faltaban apenas dos días para que empezara el semestre en la UNAM y mi ilusión se desbordaba por cada rincón de tan inmensa ciudad.

Hoy estoy en España. Ya he acabado la carrera. Y muchas cosas han cambiado: Carlos Fuentes y Chavela Vargas se nos han ido; la prima de riesgo se ha disparado (a diferencia de los puestos de trabajo); ya no disfruto del buen tequila, ni de los tamales, ni del pulque, ni de las quesadillas, ni del mezcal, ni del pozole... Pero, sin embargo, algo ha permanecido intacto, y es mi cariño por la gente con la que compartí tan vital experiencia, por los mexicanos -que me "apapacharon padrísimo"-, y por la UNAM -donde realmente aprendí lo que era una casa de estudios-. No pasa un día sin que me acuerde de alguno de aquellos momentos, ya para siempre grabados, felizmente, en mi memoria.

Anímense a viajar, si es que todavía no lo han hecho; y si les sirve, utilicen estas líneas como alternativa.
¡Viva México cabrones!